JVChinchorro.jpg

 

Las socias de la junta vecinal 39 “Amanecer del Chinchorro” le comentaron sus principales problemáticas al gobernador regional, Jorge Díaz Ibarra, quien escuchó sus necesidades y coordinó un trabajo en conjunto con las vecinas y vecinos del sector.

La principal urgencia de los habitantes de la población Chinchorro Oriente II es contar con una sede social digna, donde puedan reunirse, contar con mobiliario y poder realizar actividades especialmente para los niños y adultos mayores.  

Rosa Abarca, presidenta de la junta vecinal 39 “Amanecer del Chinchorro”, dijo que “fue una buena reunión, esperamos que nos pueda ayudar en la construcción de nuestra sede que es lo que necesitamos en estos momentos, el arreglo del parque Yerbas Buenas y el mejoramiento del entorno”.

Martina Pacaje, vecina del sector, sobre la reunión con el gobernador comentó que “para mí ha sido excelente, por lo menos es un pequeño avance que hemos dado, la junta de vecinos se presta para todo no solo para baño y tirar basura sino que para muchas otras cosas más, que prefiero no nombrar. Es importante contar con el apoyo de una autoridad que, ojalá, después de 20 años, tengamos una junta de vecinos como corresponde. Espero que sea en el parque para que los niños tengan una oportunidad de distraerse, jugar a la pelota, bailar. Los niños no tienen dónde ensayar y acá mismo tenemos muchas posibilidades, pero al no tener una junta de vecinos no nos podemos reunir y la junta de vecinos que tenemos es horrible, es una casucha que no sirve para nada, esa es la verdad, ni siquiera para reunirnos”.

Añadieron que han sufrido intentos de robos y que la sede está prácticamente cayéndose, por lo tanto, es imposible poder tener una reunión o actividad con los vecinos. 

El gobernador Jorge Díaz Ibarra enfatizó que instruirá a la División de Planificación y Desarrollo Regional (Diplader) del Gore a formar una mesa de trabajo con las vecinas y el municipio de Arica para gestionar una solución a la problemática de los habitantes de Chinchorro Oriente II.

 

Volver al Inicio